El mes de junio fui invitado por la Coordinación Sectorial de Desarrollo Académico de la Subsecretaría de Educación Media Superior de la Secretaría de Educación Pública a impartir una serie de conferencias a grupos de docentes del bachillerato tecnológico, en el marco de un taller de capacitación que debían tomar con el fin de prepararlos para impartir la clase de lógica que, en el marco de la Reforma Integral de la Educación Media Superior y los acuerdos por los que se integran las materias de filosofía al bachillerato tecnológico, comenzarán a impartir a partir de agosto de este año.
Para mi plática decidí abordar una cuestión que siempre me ha resultado conflictiva: que enseñamos filosofía como un esfuerzo de traslado y reconstrucción, como un intento de transportar la filosofía en su conjunto y con su historia, para reconstruirlo. Manteniendo Y este esfuerzo, que es el de los primeros maestros de filosofía en la Nueva España, no parece haber cambiado ni en su espíritu ni en su metodología durante siglos hasta, quizás, y solo quizás, la agitación creada por la amenaza de suprimir la filosofía.
Ya comenté en otro momento la experiencia de participar en esos talleres. Sumamente enriquecedores. Aquí, solo dejo el video y la presentación que utilicé, para mi reflexión.
El video de la conferencia
La presentación