En sus Apuntaciones históricas sobre filosofía en México, Emeterio Valverde Téllez discute el espiritismo no directamente, sino evocando la obra del cura de Tecolotlán Homobono Anaya, Disertación sobre el espiritismo publicada en 1871 en Guadalajara, con licencia del ordinario en la Tipográfica de Rodríguez de la calle Santo Domingo número 13. Como puede pensarse, se trata del furioso ataque de un cura de pueblo contra las prácticas espiritistas, escrito como respuesta a las acusaciones hechas contra el párroco porque, a decir de sus acusadores, se extralimitaba en sus funciones al denunciar sin misericordia y desde el púlpito, a quienes se entregaban al espiritismo. El inicio de la Disertación es por lo demás elocuente:
No me ocuparé de probar que el Espiritismo es una especie de religion, pues tiene sus dogmas, sus misterios, sus ceremonias, sus preceptos, sus pontífices y demas ministros. (1) Tampoco diré que tiene su aire de ciencia, pues así le llaman sus corifeos; porque tiene sus principios (aunque falsos) metódicamente ordenados que facilitan su estudio. Pero sí diré que es un error pestilente tanto mas peligroso cuanto que puede apoderarse de los hombres que ocupan mejor lugar en la sociedad, los cuales á su vez pueden arrastrar á los demas sin mucha dificultad
(1) Y tambien tiene su cabeza invisible, el demonio.
Un ejemplar de la Disertación está disponible en línea, junto con un manuscrito en latín del mismo Homobono, en la Colección Digital de Panfletos Latinoamericanos de la Universidad de Harvard, accesible gratuitamente. El libro forma parte de la Widener Library Latin American, Spanish, and Portuguese Collection, un repositorio de panfletos latinoamericanos publicados en el siglo XIX y el XX que, como en el caso del espiritismo, iluminan muchos aspectos de la cultura popular, así como de las disputas y de los problemas políticos y de las relaciones, conflictivas, entre iglesia y Estado. La colección tiene más de 500 títulos, inaccesibles prácticamente todos antes del 2002 en que se comienza a digitalizar la colección, y representan sin duda una fuente inapreciable para quienes se interesan por esos temas.
Desde el punto de vista de la edición digital, se trata de un fondo digitalizado al que se accede por distintos sistemas de búsqueda, pero que en lo esencial, sólo presentan los materiales escaneados. A estas alturas, y sin que se a visible un esfuerzo de renovación, se echan de menos herramientas que incrementaran el valor del fondo como instrumento de investigación, y no sólo como soporte para su clasificación, acceso y difusión.
La colección es uno de los ejemplos de lo que está implícito en el desarrollo de ediciones digitales: su actualización con el tiempo. En 2002 cuando inició el proyecto, la idea de tener documentos accesibles en línea era de altísimo valor. Pero ahora, ese valor, si bien no ha desaparecido, muestra sus limitaciones frente a otros fondos que, utilizando tecnología más nueva han incrementado el valor del acceso a las colecciones y los catálogos.
De cualquier manera, para los que nos interesamos en la historia de esas formas heterodoxas del pensamiento (habría que preguntarse por la relación entre positivismo y espiritismo en México), el fondo de la biblioteca de Harvard y los libros de Emeterio Valverde Crítica filosófica y la Bibliografía filosófica escaneados recientemente por Google de bibliotecas en Estados Unidos, abren una puerta inapreciable.
Existe un libro de Yolia Tortolero que, al rescatar la historia de Madero espírita, retoma ese hecho, así como en el libro El Ocaso de los Espíritus, de Mariano Leyva, editorial Cal y Arena.
Saludos